EL VIERNES SANTO Y EL RECUERDO

El Viernes Santo y el Recuerdo. La polémica del «lazo blanco».

Esta Semana Santa hemos leído cosas asombrosas. Ejemplo: El presidente de Facua Castilla y León, Jesús Ulloa, en referencia al lazo blanco que en muchas procesiones se muestran como signo de rechazo a un crimen: el aborto, ha explicado a Efe que una vez que un acto como las procesiones de Semana Santa pasa a ser un acto que muestra el rechazo a una actuación política «se convierte en una manifestación y como tal hay que tratarlo». Así ha ha pedido que los antidisturbios disuelvan las procesiones en las que se muestren lazos blancos contra el aborto porque, a su juicio, dejarían de ser actos sociales y religiosos y se convertirían en manifestaciones no autorizadas.

He aquí un ejemplo de falta de respeto a la libertad, a la libre manifestación pacífica y a la democracia.

Pero ante una pretensión tan anacrónica, por fin muchos cristianos han comprendido lo que significan las procesiones de Semana Santa. El aborto está íntimamente unido a la Pasión de Cristo, de la misma manera que lo están la guerra, el hambre y tantas otras injusticias

Porque las procesiones de  Semana Santa no son unas puntuales escenificaciones callejeras con un interés turístico. Las procesiones (todas las procesiones de Semana Santa) son un recuerdo vivo de la Muerte y Resurrección de Jesucristo. Por eso es imposible separar esas procesiones de la Pasión de Cristo. El aborto como cualquier otra conducta negativa (guerras, hambres, injusticias…) tiene que ver con la Pasión (Semana Santa) de Jesucristo.  No, como dice el editorialista de El País (9 abril 2009), que » las celebraciones de Semana Santa más que religiosas son populares». Son religiosas y como religiosas vividas por el pueblo. Esa es la cuestión.

¿Por qué, entonces, esa polémica?. ¿Les recuerda el lazo que el aborto es un crimen?

La Iglesia Católica apoya esos signos como el lazo blanco. No podría ser de otra forma. La Iglesia asume la democracia y la laicidad como algo positivo. ¡Cómo no!. Y propone (no impone) valores evangélicos con convicción y sin ocultarlos.  Y un valor fundamental es el respeto a la vida desde su inicio hasta su final.

Quizá el presidente de Facua Castilla y León, Jesús Ulloa, olvida que el primer valor y esencial valor es el derecho a la vida. La ley del aborto es un abuso de poder, aunque las leyes en un momento determinado se empeñen en decir lo contrario. Hay derechos que tiene categoría prejurídica, sin los cuales la norma carece de fundamento y de fin.

Los cristianos son también ciudadanos de este mundo y, como tales, tienen el derecho y el deber de intervenir en la vida pública.

Una sociedad democrática tiene que regularse democráticamente, aceptando la voluntad mayoritaria de los ciudadanos. Eso no quiere decir que las diferentes instituciones, organizaciones, no puedan proponer sus convicciones y sus visiones de la vida, pero siempre respetando a los demás, y argumentándolas racionalmente: Eso es lo que se hace en esta Semana Santa llevando el lazo blanco en las procesiones. Hay que defender las convicciones en la plaza pública. Porque las las hermandades no son partidos políticos, son asociaciones de laicos cuya misión es revitalizar la vida cristiana de sus socios y el compromiso de los católicos con su tiempo. Lo realmente tergiversador sería desnaturalizar estas expresiones de la religiosidad popular, convirtiéndolas en algo simplemente cultual vacías e inofensivas.

Las ministras nos dicen lo que tenemos que hacer

Ministra de la Igualdad

La ministra de Igualdad, Bibiana Aído, ha pedido a las cofradías andaluzas que harán acciones en sus procesiones de Semana Santa para protestar por la reforma de la ley del aborto que no mezclen «religión con política».

No sabe la ministra que la religión también es pública. La religión no es -como algunos pretenden- para vivir en el pasillo de casa. La religión también sale a la escena pública. La Semana Santa en Andalucía sale a la calle todos los años. Ahí tiene que estar también la denuncia de proyectos de ley que atropellan toda sensibilidad.

Hay un mandamiento que dice: «No matarás».   En Semana Santa se recuerda una ejecución. Hoy se debe recordar la muerte de miles de niños inocentes que no les dejan vivir porque leyes llevan a sus madres a esa conducta.

Las cofradías de toda España tienen que movilizarse. No sirve -como en Sevilla- delegar en una campaña de sensibilización -que también- sino que hay realizar un apoyo decidido y son simbología (lazo blanco) y palabra en la calle contra el proyecto que quiere traer más muerte a esta sociedad.  Estamos ante un tema muy grave. No es un tema de partidismo, sino de moral.

La otra Ministra

Magdalena Álvarez dice que el lince «es un animal con el que estamos sensibilizados y más ahora que hay una campaña con el que intentan devaluarlo» en referencia a la campaña contra el aborto. «El lince merece protección, creemos que así es», reiteró la ministra, quien ha anunciado que el gobierno invertirá ocho millones de euros en proteger a ese especie animal.
Esta ministra también devalúa al género humano con sus intervenciones.

Y la pregunta

Por qué esta administración (reflejada en estas ministras) nos quieren -a todos- decir lo que tenemos que hacer y no aceptan lo que la Iglesia Católica nos propone que debemos hacer?

La Iglesia habla ante el debate del aborto. Y esto extraña y molesta

¿Es extraño que la Iglesia «grite» contra el crimen del aborto?. Desde la administración, desde el partido socialista y desde otros foros se extrañan de que la Iglesia hable y propague a los “cuatro vientos” que el aborto es un crimen. Y que hay que respetar la vida más -digo yo- que la de los linces.

Un aborto no es sólo la «interrupción voluntaria del embarazo», sino un acto simple y cruel de interrupción de una vida humana Una sociedad indiferente ante miles de abortos es una sociedad enferma.
Muchos nos preguntamos ante los borradores del Ministerio de la Igualdad en relación con el aborto: cuando se deja aborto libre hasta la semana 14 ¿por qué no hasta la 12 o en la 18? ¿Nos pueden decir desde ese indocto ministerio cuándo consideran que se produce el inicio de la vida?».

Porque existe sobrada evidencia científica de que la vida empieza en el momento de la fecundación. Los conocimientos más actuales así lo demuestran y lo documentan desde las ramas de la Genética, la Biología Celular y la Embriología.

Hay que defender la vida humana en su etapa inicial, embrionaria y fetal y rechazar su instrumentalización al servicio de lucrativos intereses económicos o ideológicos; eso si es progresismo.

Semana Santa y Aborto
Y entre tanto se acerca la Semana Santa.  Va siendo hora que la Semana Santa en Andalucía sea también para pedir coherencia y denunciar comportamientos inmorales. No sólo va a ser turismo y un desfasado alarde de pertenencia a la Iglesia. Porque ¿cómo entender que una ex-ministra (Carmen Calvo Psoe) diga que conoce a “…a muchos cofrades y nazarenos socialistas», señala Carmen Calvo (PSOE), esta mujer cordobesa y presidenta de la Comisión de Igualdad del Congreso de los Diputados, encargada de debatir la reforma de la ley del aborto, y se pregunta si se ha consultado la opinión de todos los miembros de las cofradías, rechazando al mismo tiempo que se entre en este debate sobre el aborto, porque considera que sería mezclar la actividad religiosa y la política.

No, señora  ex-ministra. Si Vd. es cofrade y nazarena, si vd. es católica, no puede ser indiferente ante el aborto; no puede un día ir a las procesiones de semana santa (porque sienta esa fe católica) y al día siguiente votar en el Parlamento una ley criminal contra el más inocente.  Y lo mismo Rosa Aguilar de IU, alcadesa de Córdoba y miembro de la hermandad de la Virgen de los Dolores de su ciudad. No quiere permitir que en las procesiones se usen signos contra el aborto. Pero ¿qué esquizofrenia es esta?.  Si Vd. es creyente; si vd. es católica, no puede ser indiferente, asimismo, ante una ley criminal.
Lo mismo decimos de José Luis Gómez, coordinador local de IU en Córdoba, que pregunta si la Semana Santa es el marco idóneo para este debate.  O Rodrigo Torrijos, portavoz de IU en el Ayuntamiento de Sevilla, que dice que no se “puede utilizar una semana tan sentida para los cristianos».  Pues decimos que sí es el marco. La Semana Santa Católica no está al margen de las preocupaciones de la sociedad, no debe esconder la realidad del aborto, es decir, del crimen contra el inocente, que se quiere por vía de leyes hacer campar en España.
Por eso, hay que aplaudir a las  Cofradías de la Semana Santa vallisoletana que tienen la intención de plantear ‘algún tipo de manifiesto o signo similar a lo que están haciendo en Andalucía’ para apoyar la campaña emprendida por la Conferencia Episcopal Española en contra de la reforma de la Ley del Aborto.